Me refiero a esa sensación la cual se siente cuando conocés gente nueva, y aquella gente dice que te quiere, que te ama. Y sabés que es verdad. Pero "no te llena".
Sentirse el juguete nuevo es peligroso. ¿Por qué me preguntás? Es simple, de un día para el otro pueden dejar de decirte todas esas cosas bonitas que querés oír y que te enorgullecen. Entonces, vas a sentir que ya no te cuidan, miman, ni adoran, como el juguete nuevo y preferido de aquel nene.
Días después pasás a ser ese juguete que quedó debajo de la cama. ¿Por qué? Porque ya se acostumbraron a tenerte. Quiere decir que pasás a ser un juguete viejo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario