Una duda, un gran respuesta.

Necesito que pase rápido el tiempo, tengo millones de dudas, pero hay una que no me deja en paz... ¿Voy a estar con vos otra vez?
¡Ay! Te necesito tanto, te quiero junto a mí. No soporto la idea de que me ignores, o mejor dicho, que me hables pero que sea sólo una chica para vos, como cualquier otra. Yo a vos te quiero como si fuese que recién te conosco, mi cariño por vos no desvanece, al contrario, aumenta excesivamente.
No aguanto más un segundo sin vos, no aguanto más que no me abraces, no soporto extrañarte, pero sin embargo te amo. Te amo como siempre, como hace ya un año.

Cuando te pienso en las noches, la idea de estar con vos me parece

lejana y abstracta. Igualmente trato de ser positiva;

pero no puedo seguir inventando un cuento de príncipes y princesas

en donde el príncipe azul falta.

Tampoco puedo seguir sufriendo por vos, como si fueras mi propia vida.

Sin embargo ya varias veces he pensado que eres mi vida,

que yo daría todo por tí.

No sé si es malo que escriba esto, no sé si es malo que lo leas, no sé si esto me tendría que dar vergüenza. Lo único que sé es que estoy perdida y completamente enamorada de vos.

Y aunque muchas cosas de vos me molesten, hay otras tantas que me encantan. Y que juntas forman mi gran príncipe, que sin dudas, sos vos.